Lo conocí hace algunos años, y fue como un extraño momento de cercanía al cielo. Nunca olvidare ese tranquilo y doloroso día de diciembre, que ha quedado grabado en mi memoria como pintura pre-histórica en la cueva de Altamira.
Parece que fue hace miles de años que tuve la oportunidad de conocerlo. Para este momento se deben estar preguntando ¿Pero quien es El? La respuesta es simple, “El”, es el gran amor de mi vida Y esta es la historia de cómo nos conocimos.
¿Alguna vez han tenido la extraña sensación de vivir algo dos veces? Pues algo similar paso con ese día…
Les explico como sucedió todo, desde el inicio; fue como dije antes, único y memorable, hace aproximadamente veinte años, yo me encontraba en el café de la esquina, justo debajo de mi casa en la calle tertulia, era un lugar que visitaba con frecuencia.
Acontecía un día lluvioso, de esos que te deprimen un poco, el cielo tenia un color gris ratón, y dejaba caer lagrimas a ratos, yo daba pequeños sorbos a mi chocolate caliente blanco, porque no tomo chocolate y no me gusta el café, se podría decir que mis gustos son un poco diferentes, y no solo en mis bebidas calientes sino para todo.
Mientras veía los coches pasar y las luces que se reflejaban en los charcos de las vías como si fuesen espejos algo capto mi atención, eran un para de zapatos, unos mocasines para ser exactos del mismo color del cielo.
_ “Me encanta este clima ” dijo una voz masculina, pero suave a la vez ,que te acariciaba como terciopelo.
-“ ¿Cómo dices? Acaso estas loco ” exclamé sin elevar la vista.
El sin preguntar se sentó en la silla junto a mi, estaba a punto de reclamarle cuando sus ojos atraparon mi mirada, y me quede paralizada, totalmente perdida en ellos.
Ese fue mi Primer gran error, Yo nunca había creído en el amor a primera vista, y seamos honestos nunca me lo había permitido, porque había tenido demasiadas noches gastadas consolando a mis amigas por hombres que no valían la pena, y que lo había sabido desde el inicio, pero esta vez podía prever que la que necesitaría consuelo algún día era yo, porque con solo ver sus hermosos ojos, que hipnotizaban con un color entre chocolate y caramelo, había caído, para siempre.
En ese momento que lo vi, fue como si el tiempo se detuviese, y de pronto algo dentro de mi hizo “Click” como si toda mi vida hubiese estado esperando llegar a ese momento.
Hacia años que una mujer no me llamaba loco ”dijo el sorprendido.
A lo que yo le conteste “Yo no soy cualquier mujer ” y me levante de la silla y me fui.
Ese fue mi segundo error, porque pasé los próximos 3 días bajando a aquel pequeño café en la calle tertulia sin poder realmente disfrutar el mejor chocolate caliente blanco de la ciudad como lo había hecho tantas veces antes, no, solo podía pensar en los mocasines grises, en la voz de terciopelo envolviéndome en ella y llevando mi imaginación a tener largas conversaciones.
Por supuesto también pase esos tres días diciéndome que era una tonta por decidir justo en ese momento convertirme en “la mujer fuerte” que decía que debía ser el libro que había leído la semana pasada, era una tonta, y justo por eso nunca volvería a ver a mi misterios hombre enamorado de lo que a mí me parecía un deprimente día lluvioso.
Los días fueron pasando, y esos días se convirtieron en meses, aun frecuentaba mi café, pero poco a poco el recuerdo de ese efímero encuentro se fusionaba con mi imaginación, y se hacia mas borroso lo que había sucedido y lo que me hubiese gustado que hubiese sucedido.
Los meses se convirtieron en años, y yo aun no podía creer lo prendida que seguía de este hombre, como era posible sentirme tan conectada a alguien con quien a duras penas había cruzado 20 palabras en mi mente.
Yo sabia que era una tonta por seguir visitando el café con la esperanza de verlo, ese hombre jamás había vuelto a pensar en mi, y yo era aun mas ilusa por desear verlo de nuevo. Pero es que lo que había sentido no podía ser solo de mi parte, fuegos artificiales, como si todo encajara en su lugar, así describiría ese breve encuentro.
Me convencí que seguramente lo había soñado, que simplemente había imaginado que en un día lluvioso, igual al de hoy donde el cielo compartía conmigo un color gris ratón, unos mocasines ”
“grises, del mismo color que el cielo se acercarían para interrumpir mi vista de los charcos que parecían espejos y me hablarían de lo fabuloso que era este horrible clima.
Y para mi sorpresa, mientras veía estupefacta el reflejo de las luces de los coches unos zapatos interrumpieron mi visión, y me sacaron de mi letargo, al inicio no reaccionaba, hasta que note el color de aquellos mocasines, ¿Grises?, ¡Grises! – exclamé y rápidamente eleve la mirada como lo había hecho tantas veces sin recibir la respuesta esperada, pero esta vez seria diferente, nuestras miradas se entrelazaron de la misma forma que lo habían hecho hace tanto años, y de pronto sentí un ola de calor reconfortante dentro de mi.
Nuestro momento fue interrumpido solo por su voz, que era igual a como la recordaba en mi imaginación, pero sabia que esta vez era real, por que ningún recuerdo, y ningún sentimiento creado por mi mente podía compararse a lo que me hacia sentir su voz, era reconfortante, armoniosa y me hacia sentir segura.
El así como lo hizo aquella vez en mi mente dijo
-”Me encanta este clima”, a lo que yo respondí “¿Acaso estas loco?”
El sonrió y solo dijo – Sabia que te encontraría, he recorrido por años los cafés de la ciudad en busca de una mujer que tomara chocolate caliente blanco, y me diera exactamente esa respuesta.
Extendió la silla, y se sentó en ella, tomo mi mano, le dio un tierno y cálido beso para decir;
Nunca debes ignorar un Dejá vu.
Y fue así, como conocí al amor de mi vida, cabe resaltar que después de ese día nunca nos volvimos a separar, pues nos parecía muy dolorosa la idea de no estar juntos…
Pero esa es una historia para otro momento.
Deja Vu, Una Historia de Amor
Lo conocí hace algunos años, y fue como un extraño momento de cercanía al cielo. Nunca olvidare ese tranquilo y doloroso día de diciembre, que ha quedado grabado en mi memoria como pintura pre-histórica en la cueva de Altamira.
Autores Varios o Anonimo
No disponemos información sobre el autor o esta conformado por varios autores de la literatura universal